El libro, ese maravilloso objeto que en el antiguo Oriente se conservaba en forma de tablillas de arcilla rellenas de escritura cuneiforme, que, tanto en Egipto, Roma y Grecia se enrollaban en hojas de papiro que relataban, entre otras muchas, las gestas homéricas, y que en la Edad Media se encadenaban a los pupitres, en forma de pesados ejemplares de pergamino escritos o copiados con maestría por los monjes en sus scriptoriums.
De todo esto y de mucho más nos habla Irene Vallejo en su libro El infinito en un junco : la invención de los libros en el mundo antiguo, que se ha convertido en todo un fenómeno editorial en poco más de un año. Y eso que un ensayo de 400 páginas sobre la invención de los libros en el mundo antiguo no parecía de entrada el material más idóneo para superar 26 ediciones, y miles de ejemplares vendidos. Pero estamos ante una especie de libro de viajes que cautiva y transmite la fascinación por el libro y las bibliotecas, las primeras y las actuales.
La obra realiza un recorrido por la vida de ese fascinante artefacto que inventamos para que las palabras pudieran viajar en el espacio y en el tiempo. La historia de su fabricación, de todos los tipos que hemos ensayado a lo largo de casi treinta siglos: libros de humo, de piedra, de arcilla, de juncos, de seda, de piel, de árboles y, los últimos llegados, de plástico y luz. Es, además, un libro de viajes. Una ruta con escalas en los campos de batalla de Alejandro y en la Villa de los Papiros bajo la erupción del Vesubio, en los palacios de Cleopatra y en el escenario del crimen de Hipatia, en las primeras librerías conocidas y en los talleres de copia manuscrita, en las hogueras donde ardieron códices prohibidos, en el gulag, en la biblioteca de Sarajevo y en el laberinto subterráneo de Oxford en el año 2000. Un hilo que une a los clásicos con el vertiginoso mundo contemporáneo, conectándolos con debates actuales: Aristófanes y los procesos judiciales contra humoristas, Safo y la voz literaria de las mujeres, Tito Livio y el fenómeno fan, Séneca y la posverdad…
Irene Vallejo, nacida en Zaragoza en 1979, recibió en noviembre de 2020 el Premio Nacional de Literatura en la modalidad de Ensayo que concede el Ministerio de Cultura, por este libro que, como señaló el jurado, supone “un viaje personal, erudito e instructivo por la historia del libro y de la cultura en el mundo antiguo, que transmite un sentimiento de colectividad en el que tanto la propia autora como quien la lee se reconocen”
Tienen a su disposición El infinito en un junco en la Biblioteca de Cultura, para su consulta y préstamo, además les ofrecemos un amplio listado de libros y estudios sobre la historia del libro y las bibliotecas en el siguiente enlace:
Historia del libro en la Biblioteca de Cultura